Escritura Gótica

Proto-gótica

Alrededor del año 1060, aparece en Normandía un estilo de carolingia con trazos más gruesos y comprimidos, además de trazos más angulosos, produciendo páginas con textos bastante densos. Esta vendría siendo la primera escritura gótica, la cual mantiene la forma redondeada de la escritura carolingia.

Gótica de forma (Textura)

Durante el siglo XIII aparece en los países nórdicos.

Se caracteriza por sus anchas astas verticales, formas angulosas y sus terminaciones en forma de rombo en la base.

Estas características la hicieron ideal para el tallado en madera, por lo que fueron los caracteres que utilizó Gutenberg para su imprenta de tipos móviles.

Gótica de suma (Rotunda)

En Italia, durante el siglo XIV, aparece la gótica Rotunda (redonda), la cual era de carácter mucho más legible y fluido. Esta se utilizó hasta finales del renacimiento.

Cabe mencionar que a esta altura, aún no se implementaba el concepto de mayúsculas pertenecientes a un mismo alfabeto, y en su lugar, para establecer la categoría de mayúscula, se utilizaban letras romanas o unciales.

Gótica bastarda

Durante el siglo XV aparece la gótica bastarda, la cual tiene muchas variantes, ya que es el nombre genérico para las góticas que mezclan diferentes características como la textura con la rotunda, o la carolingia con las góticas. gótica cursiva bastarda

Aparece durante el siglo XV en Francia. Sus trazos carecen de la regularidad de las demás familias de letras góticas.

Se caracteriza por mezclar formas curvas con ángulos agudos, logrando un buen nivel de legibilidad y presentando formas suaves y llamativas.